Es un artista cubano-peruano. Las circunstancias de sus partidas (y retornos) a la Isla recorren lo central de su producción artística. Formado entre 1988 y 1992 en el Taller René Portocarrero y el Taller Experimental de Gráfica de La Habana, su obra transita del grabado a la pintura, incursionando además en la fotografía, la performance, la poesía. También en la coctelería de autor, con giros político-poéticos: Gustavo Buntinx ha calificado a su trago “Estrecho de La Florida” como una obra maestra del arte-no-conceptual. Realizó muestras importantes tanto en Lima (Sala Luis Miró Quesada Garland, 2001; Museo Pedro de Osma, 2011) como en La Habana (Galería Orígenes 2011; Sala Jean Valjean, Museo Casa Víctor Hugo, 2017).